"Caminante no hay camino, se hace camino al andar"

Destino, que palabra tan usada, manipulada, sobada..., palabra que a menudo solemos usar ya sea para afirmar su existencia o su inexistencia... ¿pero de verdad sabemos lo que significa?
Si buscamos el concepto de esta palabra en el diccionario, encontramos la siguiente definición: “Supuesta fuerza a la que se atribuye la determinación inevitable de todo lo que ocurre; también, situación a la que lleva.”
¡Vaya! el destino es una "supuesta" fuerza, y recalco el "supuesta" porque hay muchísimas personas que se dejan guiar por esto, y ni si quiera se conoce con exactitud lo que esto supone.
Personalmente no creo que algo llamado destino sea capaz de dirigir nuestra vida y de hacer que nuestro futuro sea de una forma o de otra, somos nosotros, los que con nuestros actos y acciones elegimos lo que posteriormente ocurrirá. Y sí, sé que en muchísimas ocasiones pasan cosas que pensamos que es imposible que ocurran por nuestros actos, pero… las casualidades existen, y sinceramente veo más normal hablar de casualidad que de destino…
Pero… ¿Por qué crees que existe el destino? ¿Lo has visto, sentido, percibido? ¿De verdad confías tus grandes ilusiones a algo que ni siquiera sabes y puedes explicar? ¿Dejas al destino elegir tu futuro? ¿No te parece un poco cobarde acusar al destino de lo que te ocurre?
Plantéate estas preguntas y lo que conlleva sus respuestas, medítalas bien, no tengas prisa en hacerlo, hazlo cuidadosamente y con pausa… pero hazlo, reflexiona sobre esto, te aseguro que te será útil.


Ahora y siempre, recuerda esto: "caminante no hay camino, se hace camino al andar"